Ahorrar siendo una familia numerosa puede parecer una misión imposible con los tiempos que corren, pero para Álvaro y Esther, padres de tres hijos de 8 y 4 años y 8 meses "es todo metodología: planificar gastos y marcarse objetivos de ahorro". En su casa, la cultura del ahorro está muy presente: "Nuestros hijos aprenden a ganar y ahorrar dinero desde pequeños. Tienen una hucha donde guardan lo que ganan haciendo tareas domésticas y una vez al año lo ingresan todo en el banco, menos el 10%, que pueden gastárselo en lo que quieran", cuenta este Licenciado en ADE. Otra de las reglas básicas de esta familia es "preahorrar, es decir, separar la cantidad que queremos guardar al principio del mes y no al final con lo que queda", tal y como aconsejan los expertos. Al igual que hacer un seguimiento de los gastos fijos y variables: "Apuntamos todos los gastos en un excel (también hay apps, como Fintonic) para llevar una planificación y control de los mismos. Esto es básico", señala el padre, que se encarga asimismo de revisar todos los contratos una vez al año.
En cuanto a la compra, esta familia de Madrid huye de los alimentos procesados porque "son más caros y menos saludables. Intentamos acortar la cadena de distribución y por ejemplo compramos las naranjas o los huevos directamente a los productores". Según confiesan, "todos los días viene alguien a casa a por algo que hemos vendido en Wallapop". Cuando ya no lo necesitan, lo venden. Y al revés: "En nuestra casa casi todo es de segunda mano. Tenemos muebles que nos han costado menos de 10 euros. Las grandes ciudades son un caldo de cultivo de objetos que están bien", dice este director de marketing. En el caso de su carrito de bebé, por ejemplo, lo vendieron por 300 euros cuando lo necesitaron cambiar para luego comprar un segundo carro usado por 280 euros. "Al final, hasta ganamos 20 euros", relatan. Apuntamos todos los gastos en una hoja excel No pagar por algo que puedes hacer tú solo es otra máxima en su hogar, "desde pintar o empapelar paredes hasta hacernos nuestros propios muebles, pero también cosas más sencillas como cocinar en casa o limpiar el coche tú mismo", explican. En cuanto al ocio, reconocen que esa es "la parte cara" siendo cinco. "Somos muy de campo y ese es el plan preferido de los niños", concluyen. Con ellos vive una joven aupair de China que dedica a los niños un total de 12 horas a la semana, entre clases de chino y recogerles del colegio. Teniendo en cuenta que una niñera o profesora particular cobra una media de 14 euros por hora, esta familia se ahorra todas las semanas 168 euros en extraescolares y servicios de guardería.